Entre los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) hay cuatro directamente relacionados con la alimentación. Estos objetivos son acabar con el hambre, lograr la seguridad alimentaria, mejorar la nutrición de los alimentos y promover la producción sostenible.
En la Cumbre Internacional dedicada a la innovación de alimentos desde la granja al tenedor, Seeds & Chips, se han detectado 10 tendencias que están impulsando la tecnología para la industria alimentaria hacia un objetivo más sostenible. Estas tendencias son las siguientes:
1. Democratización de la información nutricional. Establecer un sello común para alimentos con el fin de lograr la seguridad alimentaria y el conocimiento a través de la trazabilidad (a la mayor escala posible), aprovechamiento de los sensores, sistema de análisis y aplicaciones, presencia de nutrientes específicos e infraestructuras de datos construidas.
2. Bioinformática. Desde las bebidas probióticas hasta la comida funcional para desbloquear las fuentes de alimentos suministrando soluciones naturales, sostenibles y científicamente probadas para la salud.
3. Fabricación de alimentos. El diseño de nuevos sistemas alimentarios juega un papel crucial para la minimización del consumo de alimentos mientras se maximiza su aporte nutricional.
4. Análisis de datos y aprendizaje automático. Un ejemplo es el uso de aromas para facilitar la toma de decisiones al elegir un alimento respecto a su sabor y valor nutricional.
5. Agricultura nerd. El poder de la tecnología ayuda al sistema alimentario a ser más sostenible, reestructurándose la producción de alimentos para adaptarse al incremento de la densidad de población y mantener la seguridad alimentaria a pesar del incremento de la inestabilidad climática y la vulnerabilidad.
6. Nuevas soluciones de alimentación medioambientalmente responsables. Como los insectos comestibles, con un alto contenido en proteínas y mínimo impacto medioambiental, o algas como las espirulina.
7. Acortamiento de la cadena de suministro de alimentos. Reduciendo la cantidad de intermediarios, impulsando la economía rural, creando nuevas formas de comercialización de productos locales y atrayendo nuevos tipos de clientes.
8. Reutilización del desperdicio. Conectando los productores de comida con organizaciones benéficas para minimizar el desperdicio, suministrando a los minoristas la oportunidad de ofrecer productos que van a caducar a los consumidores para que puedan ahorrar dinero, reciclando los desperdicios del café para potenciar el biofuel y los bioquímicos y monitorizando el desperdicio a lo largo de la cadena para minimizarlo.
9. Hacer las elecciones saludables las más fáciles. Mediante la reutilización del desperdicio y la educación alimentaria, junto con la creación de comunidades alimentarias.
10. Educación y comunidades alimentarias. Numerosas organizaciones están reconociendo la importancia de crear comunidades online centradas en la alimentación en todo el mundo y conectadas entre sí. El conocimiento está mostrando ser una de las armas más impactantes para dar forma a un sistema sostenible.
Estas aportaciones de las nuevas tecnologías permitirán dirigir los esfuerzos hacia la consecución de un desarrollo sostenible, mejorando la sostenibilidad en el ámbito de la alimentación, aprovechando las oportunidades actuales y actuando de manera global.
Fuente: Barilla Center for Food & Nutrition
Alberto López/Ángela Ruiz