El sector agroalimentario en España es uno de los principales motores económicos, representando más del 10% del PIB nacional en la actualidad. Como apuntaba la ministra de Alimentación y Pesca, Agricultura y Medio Ambiente Isabel García Tejerina en el Fórum Europa, es uno de los sectores que contribuyen de forma más significativa a la recuperación económica. Además, supone una de nuestras mejores cartas de presentación, ya que se ha posicionado como el segundo sector exportador en nuestro país con un 16,9% del total de la venta de productos según el último Informe Mensual de Comercio Exterior del Ministerio de Economía, Industria y Competitividad.
Una de las piezas clave para mantener cifras tan positivas es la inclusión de la sostenibilidad en las industrias del sector. La sostenibilidad integral se está instaurando como una necesidad en todos los sectores, resultando esencial en el agroalimentario para poder afrontar importantes retos ambientales como el cambio climático y sociales como el incremento demográfico, entre otros.
Esta tendencia está extendiéndose cada vez más entre las industrias del sector y, prueba de ello, son los datos de uso de eSIAB, herramienta de autoevaluación de la sostenibilidad integral para las industrias del sector agroalimentario, elaborada por el MAPAMA con el apoyo de EcoAvantis. De este modo, en el último año casi se ha triplicado el número total de empresas que buscan conocer su grado de sostenibilidad, superando los 600 usuarios registrados.
Esta herramienta ofrece a cualquier industria del sector de alimentación y bebidas la posibilidad de realizar un diagnóstico de sostenibilidad integral, lo que permite a cada usuario detectar aquellos ámbitos que requieren una mejora. Para ello, cuentan con un sistema recomendador con consejos personalizados para mejorar su desempeño.
Entre las últimas funcionalidades de la herramienta se encuentra el Decálogo de Sostenibilidad, que se constituye como un compromiso voluntario de mejora continua, al que las empresas pueden adherirse y hacer público su compromiso a través de un listado, al que ya se han sumado las primeras empresas.
Entre los usuarios registrados en eSIAB se encuentran desde grandes empresas como Calidad Pascual o Heineken, hasta microempresas como A Castrexa. Entre los usuarios de la herramienta, el tipo de empresa agroalimentaria más representado es el de la pyme, suponiendo casi la mitad de registros, como muestra el siguiente gráfico.
Necesitamos a corto plazo un sector agroalimentario resiliente frente a los diferentes retos ambientales, sociales y económicos a los que nos enfrentamos, capaz de abastecer las necesidades de la creciente población mundial. De este modo, el progreso de las industrias del sector en nuestro país hacia la sostenibilidad es un gran avance en este sentido, lo que además supone contribuir en la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Alberto López/Ángela Ruiz