Los líderes en sostenibilidad tienen mucho de lo que hablar. En ocasiones, hablan de ello en conferencias, a clientes o incluso escriben artículos como invitados en algún portal web. Independientemente de la audiencia o de la plataforma, si te encuentras inmerso en la sostenibilidad, tienes que comunicarlo. Sin embargo, esta comunicación puede fallar.
¿Qué pasa cuando te das cuenta de que tu mensaje de sostenibilidad no está siendo recibido correctamente?
Fast Company publicó un artículo en el que destacó 9 maneras diferentes de comunicación en las que los líderes en comunicación pueden estar fallando. Pensamos que las razones mencionadas en el artículo también funcionan perfectamente para la comunicación en temas de sostenibilidad. Y son las siguientes:
1. La desconfianza frente a confianza ¿Alguna vez has hablado con alguien que no está al 100% convencido de la sostenibilidad y te has puesto a la defensiva? En lugar de desconfiar de la persona que está hablando trata de confiar en ellos. Cuando eres más abierto, las comunicaciones pueden llegar mucho más lejos.
2. Monólogo frente a colaboración: estás hablando ante una habitación llena de gente, y te encuentras hablando sin parar. Tienes que tomarte un momento y mirar a tu público. ¿Están comprometidos con tu discurso? ¿Ves gente haciendo movimientos de cabeza? Es muy fácil dejarse llevar al hablar, porque todo el mundo quiere hacerse entender. Sin embargo, despertar interés en el público y que exista colaboración es lo ideal para hacer de un monólogo una colaboración. Comprometerse con la audiencia y ver qué pasa.
3. Complejidad frente a simplicidad: El campo de la sostenibilidad ama las siglas. GEI. LCA. GRI. CDP. SASB. IIRC. La lista sigue y sigue. Mientras que muchas personas dentro del ámbito de la sostenibilidad pueden saber de lo que se está hablando cuando se hace referencia a estas palabras, hay muchas otras que no. La simplicidad es la clave, no te dejes llevar por los tecnicismos.
4. Insensibilidad frente a tacto: Cuando se habla de sostenibilidad, a menudo se habla de cambio climático. Por desgracia, el cambio climático sigue siendo un tema políticamente complejo, y la gente puede conseguir obviarlo cuando se escucha a alguien hablar sobre ello. No tienes que evitar el tema por completo, pero hay que ser inteligente y discreto acerca del enfoque según los temas.
5. Logros frente a Potencial: Puedes tener muchos informes publicados y un sin fin de oportunidades para ofrecer charlas y hablar. Sin embargo, no puedes dormirte en los laureles. Debes saber escuchar y aprender de los que te rodean ya que siempre hay cosas que escucharás por primera vez.
6. Divagar frente a Concretar: Cuando quieres convencer a un cliente sobre por qué es importante publicar una memoria de sostenibilidad, no debes andarte por las ramas contando anécdotas. Sé concreto, ve al grano y resalta los puntos clave.
7. Generalización frente Especificidad: cuando se redactan planes de sostenibilidad, informes, etc., es fácil llegar a ser muy genérico con algunas de las informaciones. “Empresa X se preocupa profundamente por el medio ambiente.” “Empresa X trabaja muy duro en el reciclaje.” En lugar de cuestiones comunes, intenta conseguir cuestiones específicas. ¿Cómo una empresa ha logrado sus metas de reciclaje? ¿Qué diferencia a una empresa cuando se trata del cuidado del medio ambiente? Las comunicaciones deben ser significativas.
8. Lógica frente a Emoción: Hay tiempo para la lógica y tiempo para la emoción cuando se trata de la comunicación, pero ¿qué sucede cuando no se reconoce cuándo se deben utilizar alguna de estas dos tácticas? Si estás tratando de motivar a una multitud en una conferencia para que se impliquen con la sostenibilidad, tienes que tocar la emoción, pero si estás hablando con un cliente sobre un posible proyecto, tienes que tocar la lógica.
9. Desproporción frente a Perspectiva: El ámbito de la sostenibilidad es siempre cambiante, y nadie puede ser un experto para siempre. No se puede escribir artículos como experto absoluto porque continuamente se están publicando nuevas informaciones en investigaciones que pueden hacer que des un paso hacia atrás y aprendas de tus compañeros. Se humilde, después de todo, a nadie le gusta escuchar a un “sabelotodo”.
Fuente: Environmentalleader
Marzo 2015